Si yo, tú. Si tú, yo también. Si lloro, ríeme. Si ríes, lloraré, pues somos el equilibrio, dos mitades que forman un sueño.
Si me dejas, mantendré viva la llama hasta que regreses, y sin preguntas, seguiremos caminando. Y sin condiciones, te seguiré perdonando. Si te duermes, seguiremos soñando. que el tiempo no ha pasado, que el reloj se ha parado.
Y si alguna vez la risa se te vuelve dura, se te secan las lágrimas y la ternura, estaré a tu lado, pues siempre te he querido, pues siempre te he cuidado.
Pero jamás te cures de quererme, pues el amor es como Don Quijote: sólo recobra la cordura para morir. Quiéreme en mi locura, pues mi camisa de fuerza eres tú, y eso me calma, y eso me cura...
Si yo, tú. Si tú, yo.
Sin ti, nada.
Sin mí, si quieres, prueba.
Sin ti, nada.
Sin mí, si quieres, prueba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario